Blow & Glow

Visito este salón solamente para la estilista Karlin Esmaili. Ella es profesional, amable y gentil. Aprecio mucho que sea flexible con los horarios y nunca te haga esperar. ¡La recomiendo altamente!

El salón es hermoso y espacioso. Me encantan las luces y realmente dieron toda la luminosidad. Mi cabello africano recibió un tratamiento de princesa por parte de Karlin. Por favor, salúdala de mi parte cuando vayas allí. Todos los demás representantes también fueron igual de amables.

El estacionamiento/ubicación/limpieza fue excelente. Atención al cliente: ninguna. Ambiente: incómodo porque nadie me hablaba más que unas pocas palabras en inglés. Pero parecía que entre miradas y gestos, las mujeres armenias estaban teniendo una gran conversación. Producto/Lavado y peinado real: decente, pero parecía que Ani (creo que ese era su nombre) no quería realmente hacerme el pelo, así que apresuró el lavado y mojó mucho el cuello de mi camisa. Afortunadamente iba de camino a casa para cambiarme, pero esto ocurrió porque estaba apresurando. Mientras me lavaban, la puerta trasera estaba abierta y entró una ráfaga de humo de cigarrillo y se lo mencioné a Ani, pero ella no me entendió. El secado del pelo fue muy rápido. Me gustó y ella hizo un buen trabajo, así que le dejé una buena propina. Sentimientos muy encontrados sobre este lugar. Fui allí debido a la disponibilidad de última hora y a la disposición para atender mi petición. Volveré cuando esté desesperado, pero no buscaré sonrisas ni charlas informales como estoy acostumbrado en otros salones de peinado. Además, no entiendo por qué tenían la radio encendida, cuando hay muchas opciones de transmisión sin comerciales ruidosos. Baja calificación debido a que no era un ambiente acogedor y cómodo. Los otros servicios que ofrecían se veían realmente buenos.

Su menú no refleja los precios. Por ejemplo, en la herramienta de reservas, te permite obtener un Mini Me blow-out. Cuando llegué, me informaron que estaba desactualizado y que se me cobraría el precio completo por mi hija de 5 años. Acababa de lavarle el pelo y pregunté si eso cambiaría las cosas. Empezaron sin lavar y volvieron y dijeron que seguirían siendo los precios de adultos. Esto tampoco es ético. Se molestaron cuando pedí que lo lavaran. En segundo lugar, para mi hija mayor, que se estaba haciendo un peinado, la señora comenzó a rizar y luego me preguntó si me gustaba, agregando que esto tendría un costo adicional. Me cobraron una tarifa más alta argumentando que preferirían que se les pagara por el trabajo realizado. Si hubieran preguntado si se necesitaban los rizos desde el principio, habría tomado la decisión de no hacerlo en lugar de que me dijeran que habían hecho el trabajo y querían cobrar la tarifa más alta. Mi peinado personal con Virab fue absolutamente agradable, eficiente y el resultado fue excelente. El servicio al cliente de este salón no es bueno y los precios no son transparentes. Recomendaría encarecidamente cambiar la propuesta de servicio si quieren clientes frecuentes. Aunque dejé una propina del >>20%, definitivamente NO volveré.