Claudia Avila, la nueva chica de portada

Se llama Claudia Ávila, tiene 14 años y desde hace meses no piensa en otra cosa que en celebrar su fiesta de quinceañera. Está en esa edad en la que nada ni nadie parecen capaces de alterar su sueño, un anhelo alimentado por el hecho de haber sido la ganadora del concurso de Quinceañera.com para ser la chica de portada de su próxima revista.

Además del privilegio de ser la cara principal de la revista y de poder desfilar por la pasarela de la Quince Expo, el 11 de marzo en el Sportsmen’s Lodge Event Center de Studio City, Claudia pudo elegir entre un vestido y un premio en efectivo de 700 dólares.

«Todavía no sé lo que voy a hacer con los 700 dólares, pero sí tuve claro que prefería el dinero al vestido porque me viene mejor», confiesa con sinceridad. «El vestido lo puedo conseguir más fácil y que se ajuste al diseño que yo quiero. Ya tengo una señora que me lo puede hacer».

Entre los 700 dólares y sus familiares, confía en juntar suficiente dinero como para hacer una fiesta «grande», con entre 150 y 200 invitados, entre los que estén las personas más importantes de su vida.

Es algo que tiene claro desde que su hermana mayor, de 20 años, hizo una fiesta para celebrar su fecha señalada .»Aquella estuvo bien pero no estuvo tan grande», dice con una sonrisa. «La verdad es que no me acuerdo de cuánta gente había, porque hace ya unos años. Aunque creo que eran más de 100 personas».

Quiere tener su fiesta porque «se me hace bonito y una buena experiencia, un evento que sea tradicional, con un baile, un vals, mi baile sorpresa, mi vestido e ir a misa también».

De momento, ha recurrido a internet para hacerse con ideas y a través de revistas, donde ha aprendido bastante sobre la fiesta, pese a que son muchos detalles. «Quiero que sea un salón, pero todavía no estoy segura de dónde. La verdad es que todo el proceso se me hace muy complicado. No acabo de empezar y ya me estoy desesperando», asegura. «Quiero estar segura de que tengo todos los detalles, lo que me ofrece un salón u otro, ventajas y desventajas».

Lo está haciendo todo como buena mexicana, nacida en Guadalajara, Jalisco, y una ciudad en la que estuvo hasta los cinco años.  Quizá por eso se acuerda de pocas cosas, de su casa en México, del jardín de infancia al que asistía, «un lugar muy diferente de donde vivo aquí».

Ahora reconoce que le gusta más California y que se ha adaptado muy bien al estilo de vida de su ciudad y su barrio, Paramount.  Allí asiste al colegio Paramount Middle School, donde da rienda a sus otras pasiones. «Me gusta bailar y practicar deportes como el fútbol y el voleibol».

Y después están sus amigos, inmersa como está en el mundo latino. «Me junto con puros hispanos que hablan español», explica. «Ellos hablan con una mezcla de español e inglés, como Spanglish, una influencia que le viene del hecho de haber vivido en Mexico hasta los cinco años».

Esas raíces la han llevado a estar en puertas de su fiesta más trascendental. Tiene hasta el 6 de enero, cuando cumpla los famosos 15. Para ello, espera poder trabajar para poder contribuir a pagar por todo. «Mi papá también quiere que trabaje para poder juntar dinero. De momento estoy estudiando álgebra, historia, matemáticas y me he apuntado al violín desde hace como seis meses, algo que me gusta mucho».

Solo le preocupa que algo se le pueda torcer en los preparativos de la quinceañera. «Temo que no salga bien el baile sorpresa o que el vestido se descomponga o se rompa, o que me falle un chambelán. Detalles así se me pasan por la cabeza», certifica.

En cuanto a la opción de fiesta o viaje, Claudia siempre ha preferido la fiesta. «También mi hermano me dijo que era la oportunidad de cumplir mi sueño de ir a París o a Italia, pero esto es una sola vez en la vida. Tengo que aprovecharlo al máximo», dice. «Esto me puede servir de experiencia por si me caso, para aprender a organizarme esta clase de fiestas», comenta entre risas.