
Suena mucho más complicado de lo que es: implementar hábitos saludables en tu rutina diaria puede marcar una gran diferencia en el mundo.
Puede comenzar por saber cuáles son algunos elementos reciclables
Vidrio: botellas, frascos
Plástico: botellas, tapones, bolsas
Latas de aluminio
Papel: el que llega por correo, periódicos
Electrónicos: teléfonos, computadoras
Baterías
Cartón: cajas de cereales, cajas de mudanza, cajas de regalos
Textiles: Ropa
Todos estamos familiarizados con el dicho: «reciclar, reutilizar y reducir»
Asegurarnos de que estamos haciendo nuestra parte para reciclar todos estos artículos de la manera adecuada. Cada vez que escuchamos las palabras: «reciclar, reducir y reutilizar», aprendemos cuál es su significado en la escuela, en los comerciales de televisión y durante toda nuestra infancia. Somos conscientes de lo que significa cada palabra, pero en ese momento no vemos el impacto a largo plazo de lo que realmente significa reciclar. A medida que pasa el tiempo, comenzamos a darnos cuenta de la realidad del mundo y de cómo cada individuo puede hacer su parte para disminuir la circulación de desechos.
No solo puede reciclar, sino que hay muchos artículos disponibles para que las personas no consuman cosas a diario que se convierten en desechos. La contaminación también se reduce y la vida silvestre estará protegida con menos desechos circulando, ¡con el simple hecho de reciclar!
Ve este video sobre cómo reducir desperdicios:
https://youtu.be/Nx2A_-RLKYs
Los cambios simples que hacemos a diario pueden ser enormes para la sociedad, sin siquiera saber que está mejorando nuestro entorno. ¡En promedio, cada individuo produce 4.4 libras de desechos sólidos al día! Los árboles y los animales marinos se pueden salvar si las personas comienzan a vivir con la frase “reciclar, reducir y reutilizar”.
En conclusión, los dos elementos que nunca debe olvidar reciclar son el plástico y el aluminio. El plástico se puede reciclar en forma de ropa o algún otro producto básico que no se puede reciclar nuevamente, y el aluminio, que no tiene límite en las veces en las que se puede reciclar.