
Si alguna parte en el proceso de organizar tu fiesta de quince años puede demostrar que realmente ya estás hecha toda una mujer, es precisamente escogiendo a tu corte de honor.
Habla con tus padres y determina el tamaño de tu corte de honor. Así sabrás cuántos miembros debes escoger para que te acompañen en este momento tan importante.
Tanto si son tus amigos, como si son hermanos, primos o allegados a tu familia, ten en cuenta que el saber confrontar con madurez estas decisiones es muy importante para el éxito de tu celebración de Quinceañera. Aquí te brindamos unos consejitos para hacer más fácil este importante paso y ayudarte a tener la corte de honor de tus sueños.
Corte de honor
1 – Habla con tus padres y determina el tamaño de tu corte de honor. Así sabrás cuántos miembros debes escoger para que te acompañen en este momento tan importante.
2 – ¡Es tu corte! En primer lugar, debes tomar en cuenta que es tu fiesta, es tu sueño hecho realidad y por ello debes hacer valer tu punto de vista pero ¡sin dramas!
3 – Aprende a controlar tus emociones. No te pongas a la defensiva si tus padres o algún miembro de la familia quiere imponer a alguien en tu cortejo. Piensa bien lo que vas a decir antes de hablar y explícaselo detalladamente a tus padres.
4 – Haz una lista preliminar. Si tienes muchos candidatos, escribe todos los nombres primero, la razón por la que deben formar parte de tu corte y la prioridad que tienen frente a otros candidatos. Puedes incluso hacer un puntaje del uno al diez para que puedas evaluar con mayor precisión.
5 – A la hora de anunciar tu decisión, prepárate con cuidado. Trata de no comprometer a nadie en exceso y prepárate mentalmente para un sí o un no. No te ofendas si alguno de tus candidatos rechazan la oportunidad de formar parte de tu corte de honor, y entiende que estas decisiones no dependen solo de ellos, sino de si pueden o no obtener el permiso de sus padres o de si tienen dinero suficiente para los gastos.
6 – Mantén la mente abierta – Ensayar con tu corte, ponerte de acuerdo en todos los detalles y mantener la cordialidad en un grupo no es tarea fácil. Toma en cuenta las diferentes personalidades de cada uno y atiéndelos a todos sin establecer preferencias.