/
/
/
Agrega más vida a tu vestido de Quinceañera.
Agrega más vida a tu vestido de Quinceañera.

Agrega más vida a tu vestido de Quinceañera.

Con un corte aquí y allá, tu vestido de Quinceañera puede adoptar un propósito completamente nuevo.

¿Qué harás con tu vestido de Quinceañera mucho después de que el foco de atención haya pasado? Si eres como la mayoría de las chicas que también tuvieron el privilegio de tener una Quinceañera, es probable que tu vestido termine en el fondo de tu armario y sirva como un recuerdo de tu grandiosa celebración. Incluso puede ser pasado a otra chica de tu familia o, si tu corazón lo desea, ser donado para que futuras Quinceañeras también lo disfruten.

Pero si no estás lista para deshacerte de tu vestido o estás tratando de obtener más provecho de tu inversión, hay ciertas modificaciones que puedes hacerle para convertir tu antiguo vestido de Quinceañera en una nueva creación.

Vestido de Quinceañera

Con la promoción en mente: Si tu Quinceañera fue antes de tu promoción, también puedes usar tu vestido para ese evento. Una forma sencilla de hacerlo es tener una costurera profesional, cortar tu vestido largo y convertirlo en un cómodo mini vestido, o agregarle un dobladillo estilo mullet: largo en la parte de atrás y corto al frente.

Ansias de colores: Si tu vestido es blanco, tienes la ventaja de teñirlo de otro color. En combinación con modificaciones menores, esto puede hacer que el vestido parezca una opción completamente nueva.

¡Ta-da! Agregar mangas a un vestido que antes no las tenía es una forma notable de cambiar su estilo. Agregar mangas largas completas, de tres cuartos o cortes inspirados en chaquetas te permitirá volver a usar el vestido en otra ocasión formal.

El cambio radical: Cámbialo. Literalmente. Si tu vestido de Quinceañera tenía un corsé en la parte superior, considera reemplazarlo por un escote halter o de tirantes. Si tenía una falda de satén, cámbiala por una falda completa de tul.

Todo en los detalles: Considera diferentes adornos para reutilizar tu vestido. Por ejemplo, un bordado de encaje luciría encantador en lugar de una hilera de cristales que antes adornaba tu vestido, y viceversa.

 

 

Publicaciones relacionadas